Ya estamos cerca de Carnaval y los niños piden disfraces para el cole. Eso normalmente significa un montón de trabajo o rendirse y gastar dinero en disfraces que se rompen o acabaran en una caja en el armario. Hoy intentamos hacer un disfraz de Lego que no exige una inversión muy grande ni en dinero ni en tiempo.
Parte 1: Manos y Cabeza
No tenemos Bauhaus o Leroy Merlin cerca y por eso vamos a otro sitio que tiene de todo. El Bazar más cercano. Ahí encontramos algunas cosas interesantes que podemos usar para la cabeza:
- Un rollo de cinta adhesiva de color amarillo: 1,50€
- 2 hojas de «papel de goma», no sé cómo se llaman: 0.80€ cada uno. (Seguramente funcione con un papel amarillo grueso también pero puede ser que sea un poco más frágil).
- Una papelera de plástico: 1,50€ (también puede servir una ampolla de 7 litros de agua o una lata plástica muy grande).
Qué tenemos de reciclaje
Teniendo en cuenta que muchos disfraces sólo los usamos una vez, es ideal si podemos encontrar algo reciclado para nuestro disfraz de Lego. Por ejemplo, algunas latas vacías de Pringles (ok, confieso que las tuvimos que comprar, abrir una a una y comer todas sus patatas antes de encontrarlas por arte de magia en nuestra papelera de reciclaje…). Pero puesto que es basura no vamos a contar el coste de las Pringles.
- 2 o más latas vacías de Pringles: 0€
- La base del rollo de cinta 0€. (También sirve con alguna otra cosa redonda como una lata de atún o algo parecido).
Qué herramientas necesitamos
Como hemos prometido, no vamos a usar herramientas especiales. Para este proyecto será suficiente tener:
- Unas tijeras.
- Un cuchillo afilado o con dientes pequeños.
Hacemos los manos
Para evitar quedar bloqueados en el primer paso, empezamos con algo que parece bastante sencillo, las manos. Cogemos una lata de Pringles y la cortamos en 3 trozos del mismo tamaño. Después cortamos el tercer trozito en dos partes. Cuando hayamos acabado tendremos estas cuatro piezas:
Ahora cogemos la cinta amarilla y cubrimos la parte exterior de los trozitos de la lata Pringle. De esta manera evitamos pintar cosas. Por supuesto si tienes pintura amarilla en casa con la que pintar las latas, adelante con ello. Al final juntamos los dos trozos medios a los dos trozos cilíndricos con un poco más de cinta y ¡voilá! ya tenemos dos manitas de Lego.
La cabeza
Ahora vamos a por algo un poco más complicado, pero no te preocupes, con un poco de paciencia va a salir bien. Para la estructura empezamos con adaptar el tamaño de la papelera al tamaño de la cabeza del niño. En nuestro caso hemos tenido que cortar 5-7 cm de la papelera.
Luego cogemos otra lata de Pringles y la cortamos en 4 partes como en esta imagen:
Ahora queremos hacer la curvatura para el cuello del muñeco y para ello vamos a usar los trozos de las latas Pringles. Únelos con cinta (no hace falta que sea amarilla) en el parte recién cortada para crear la forma curvada. Este paso es un poco complicado pero no te preocupes si no sale perfecto. Tampoco somos expertos de manualidades y alguna parte de este paso se podrían mejorar, pero no importa porque vamos a poner algo por encima en el siguiente paso, solo estamos buscando la forma curvada para el cuello.
La parte exterior
Ahora vamos a fijar el «papel de goma» en el exterior de la papelera. Ten cuidado para cubrir también la parte del cuello, y luego tienes que trabajar con los ángulos al tope para juntarlo todo.
Como colofón, ponemos el tope de la cabeza. En nuestro caso hemos utilizado el cilindro interior del rollo de cinta pero puedes coger una lata o otra cosa redonda. Hacemos un par de vueltas con la cinta amarilla y afinamos el tope por encima de la cabeza.
Pintar la cara
Ahora hemos llegado a un paso super importante. Ya tenemos un cilindro amarillo pero tenemos que darle personalidad. Para conseguirlo hemos buscado en internet una imagen que le gusta a nuestro hijo. Aquí puedes encontrar mucha inspiración ».
En nuestro caso vamos a por un estilo chulo con gafas de sol y acabamos con este chico:
Un poco más grande que el original:
Parte 2: El Cuerpo
Para el cuerpo necesitamos lo siguiente:
- Una caja de cartón bastante grande.
- 3 hojas de papel rojo en formato A3. Lo hemos encontrado en el bazar por 0,60€ cada uno. Sin embargo si tienes un poco de pintura en casa probablemente funcione igual de bien.
- Cinta transparente y pegatina de papel
La estructura
Empezamos con medir más o menos la anchura de los hombros del niño en el cartón y cortamos un trapezoide que luego lo utilizaremos como plantilla para las dos partes.
En nuestro caso, una vez hecho vemos que la base es un poco demasiado ancha. Si repetimos en el futuro, lo haremos un poco más estrecho para conseguir una forma aún más parecida a la del muñeco original.
Ahora tenemos que acabar la estructura. Aquí no hay trucos mágicos, solo hemos cogido los trocitos de cartón que quedan y poco a poco hemos creado una estructura estable usando pegamento y cinta bastante fuerte.
La camiseta
Ahora que tenemos la estructura del cuerpo tenemos que darle un poco de personalidad. No teníamos pintura en casa y por eso hemos comprado las hojas de papel. Nuestro hijo quería una camiseta roja y al final ha sido mucho más sencillo usar papel rojo que pintar.
Esta parte es bastante sencilla, solo cortamos las hojas de papel en la forma de la estructura y las fijamos con pegamento y un poco de cinta adhesiva transparente.
El resultado, una camiseta roja por 1,80€.
El resultado final
Antes de acabar hemos pensado que nuestro chico tiene ir bien vestido a la rua del cole y por eso hemos pensado en pintar una chaqueta con corbata y todo.
Para no ser profesionales hemos conseguido un disfraz bastante bueno en un tiempo aceptable y un coste bajo. Además hemos aprendido muchas cosas para futuros proyectos.
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